El gas natural vehicular, más conocido como GNV, ha sido objeto de varios mitos y percepciones erróneas en Colombia. Estas falsas creencias crean miedos en los conductores sobre considerar esta alternativa como una opción para los vehículos. Sin embargo, es importante desmitificar estas ideas equivocadas para comprender realmente los beneficios y las ventajas de tener GNV.
Mito 1: El GNV afecta el rendimiento del motor y reduce la potencia del vehículo.
Los motores convertidos a gas natural están adecuados para funcionar con este combustible, lo que garantiza un rendimiento óptimo y una potencia comparable a la de los motores de gasolina.
Mito 2: El GNV es peligroso y menos seguro que la gasolina.
El gas natural es uno de los combustibles más seguros disponibles. El GNV es más ligero que el aire y se disipa rápidamente en caso de fuga, reduciendo así el riesgo de incendio o explosión.
Mito 3: La infraestructura de carga de GNV es limitada y poco confiable.
En la actualidad, en Colombia hay una red creciente de estaciones de servicio que ofrecen GNV en todo el país, lo que hace que sea más conveniente y accesible para los conductores.
Mito 4: El GNV es más costoso que la gasolina a largo plazo.
El precio del GNV tiende a ser más estable y menos susceptible a las variaciones del mercado internacional del petróleo, lo que puede resultar en ahorros significativos para los conductores.
Los mitos sobre el Gas Natural Vehicular en Colombia a menudo están basados en percepciones erróneas y desactualizadas. El GNV ofrece numerosos beneficios, tanto económicos como medioambientales para los conductores
